Con la ausencia por lesión del capitán Iñaki Narros, KIA Sakimóvil Basket Navarra se vio superado en un encuentro en el que no rayó a buen nivel en defensa y en el que tampoco le acompañó la suerte. Los de Joaquín Prado tan sólo pudieron oponer resistencia en el primer cuarto ante un Covirán Granada enchufado que no tuvo demasiados problemas para colocar el 1-0 en la serie.
El primer periodo fue el único en el que hubo cierta igualdad. Si bien concedieron demasiado a su rival, los navarros se mantuvieron vivos comandados por la veteranía de ‘los Adrianes’, García y Fuentes, y la presencia esporádica pero acertada de Manu Vázquez y Dylan Poston. 24-19 concluyó un primer acto en el que hubo más diferencia en el electrónico que sobre la pista, donde los rojos -vestidos de negro- no parecieron inferiores. Falto acierto, algo de lo que sí gozaron los locales con mucha puntería desde el perímetro.
No pudo empezar mejor el segundo cuarto, con un triple de Fuentes que apretaba el marcador (24-22). Pero ahí se quedó la reacción de los de Prado, quienes entraron en colapso sin anotar en más de cuatro minutos -no entraban ni los tiros libres: 0/6 en ese rato-. Aprovechó la ocasión el cuadro de Pablo Pin, arrollador, para abrir hueco con un parcial de 18-2 (42-24). Víctor Hidalgo salió al rescate para liderar una tímida respuesta que, por desgracia, se quedó en amago con un triple de Bortolussi que colocó el 51-32 al descanso.
Las opciones de KIA Sakimóvil Basket Navarra pasaban por elevar el nivel defensivo y apretar a la vuelta de los vestuarios. Pero no fue así, pronto se vio que no era el día. Se le hizo el aro pequeño al conjunto navarro, incapaz también de frenar el caudal anotador de su adversario, decidido a plasmar en el luminoso su condición de claro favorito en la eliminatoria. Los locales fueron abriendo cada vez más brecha mientras los visitantes, impotentes, se veían cada vez más lejos en el marcador y más lejos del triunfo. 77-42 terminó el tercer periodo.
El último cuarto fue un mero trámite en el que KIA Sakimóvil Basket Navarra trató de recortar distancias por una cuestión de amor propio. Pero la voluntad y la incansable pelea de los de Prado -qué casta la del navarro Pablo Yárnoz para rebotear hasta en dos ocasiones y anotar con el partido ya imposible- no sirvieron para reducir distancias. 97-59 y la primera se quedó en Granada.
Pero hay una buena noticia: una nueva oportunidad está a la vuelta de la esquina. El segundo asalto del play-off, en apenas 36 horas -este domingo (12.30 horas)- en el mismo escenario. Será un partido muy distinto, seguro. Toca resarcirse, toca pelear por una victoria que iguale la eliminatoria.
COVIRÁN GRANADA (97) De Cobos (16), Bowie (14), Almeida (14), Bortolussi (8), Uta (5) -quinteto inicial-, Fernández (12), De Lattibeaudiere (4), Corts (9), Iván Martínez (4), Milekovic (5), García (4) y Germán Martínez (2).
KIA SAKIMÓVIL BASKET NAVARRA (59) Fuentes (7), Poston (8), Vázquez (11), Hopfgartner (2), Hidalgo (12) -quinteto inicial-, García (13), Bleeker (2), Zabalo y Yárnoz (4).
PARCIALES 24-19, 27-13 (51-32), 26-10 (77-42) y 20-17 (97-59).
ÁRBITROS García León y González Cuervo. Eliminaron al visitante Bleeker.
