Muchos alicientes en el partido que este sábado enfrenta a Basket Navarra y Real Canoe en Pamplona (19 horas). Alicientes deportivos, con el conjunto navarro en busca de su tercera victoria consecutiva en casa, y también alicientes a nivel social y solidario. Las entradas costarán 3 euros y la recaudación íntegra se destinará a la causa, para la investigación de la cura de una enfermedad rara como el Síndrome de Dravet.
El club espera gran afluencia de público en el pabellón Universitario y desea que se viva un bonito ambiente. Los objetivos, dos: el primero, que el equipo se sienta arropado en pos de un nuevo triunfo; el segundo -y no menos importante-, colaborar con una buena causa que necesita la ayuda de todos.
En el plano meramente deportivo, Basket Navarra quiere seguir mostrándose como un equipo sólido y ganador en casa, donde cuenta sus partidos por victorias. “Uno de nuestros objetivos es hacernos fuertes en nuestra pista. Tenemos ganas de jugar aquí, con nuestra gente, y de poder refrendar el buen trabajo de la semana”, señala David Mangas, entrenador de los rojos, quien añade: “Fuera de casa nos está costando mantener la intensidad y el nivel. Vamos a ver si damos un paso más como equipo y competimos mejor para quitarnos ese mal sabor de boca”.
Visita Pamplona el Real Canoe, un recién ascendido que, aunque no ha comenzado con buen pie -una victoria y cuatro derrotas le contemplan en este inicio de la competición-, tiene peligro. “Son nuevos en la LEB Plata pero tienen jugadores que conocen esta categoría y otras superiores”, señala Mangas. “Tienen dos buenos bases -Óscar Herrero y Dani De la Rúa- que son los motores del equipo y le hacen jugar bien; Ander Martínez aporta puntos desde el exterior con un buen lanzamiento; y por dentro tienen jugadores físicos y jóvenes con hambre y ganas de crecer -Tyson Pérez u Osas Ehigiator- que pueden hacer daño”, valora el técnico.
Mangas tiene a su disposición a todos los jugadores, incluido Lamine Dieng. El interior senegalés acaba de llegar y no ha realizado muchos entrenamientos con sus nuevos compañeros, pero está listo para ayudar. “Lleva poco con nosotros, pero su presencia nos permite tener más rotación interior y ser un equipo más agresivo”, asegura el entrenador. Un alivio su llegada, sin duda.
